MITOS Y LEYENDAS
LEYENDAS: Son narraciones que tienen principio en recuerdos históricos o en hazañas, pero a las que se agregan fantasías y habladurías populares. No sólo refieren los sucesos reales ocurridos sino otros de dudosa veracidad o misteriosos.
MITOS: Llamamos mitos en general a una serie de personificaciones de fuerzas naturales que gobiernan la vida del pueblo, especialmente en él ambiente campesino. Todo depende del comportamiento que sepamos observar y del respeto que les otorguemos.
Es notable la tendencia moral que en nuestras tribus primitivas determina el trato que se debe a los animales y seres naturales y aun a ríos, lagunas, montes, etc. Separamos los mitos en mayores, menores y espantos.
Los mayores constituyen una especie de deidades tutelares; los menores se asimilan genios maléficos o traviesos; los espantos son simple visiones o sugestiones que se emparentan con los espíritus o ánimas de los muertos y se localizan en los lugares sombríos, lóbregos o medrosos como cementerios, graneros, casonas derruidas, edificaciones muy antiguas, parajes solitarios, etc.
MITO BRUJA
La bruja de hoy, como la de ayer, tiene dos grandes campos de actividades: el ritual, que comprende la asistencia a aquelarres y a misas negras y la realización de sacrificios; y el práctico, que consiste en la fabricación de hechizos y sortilegios, el maleficio y el mal de ojo.
En la zona, cuentan que cuando los hombres madrugaban a las largas jornadas laborales se las encontraban en los caminos. Y no dejaban dormir a los hombres jóvenes.
MITO DE LA BARBACOA DEL MUERTO (GUANDO)
Cuentan que este espanto va acompañado de cuatro personas, o esqueletos que generalmente son los cargueros del muerto. Aparece a la orilla del camino, a la orilla de un río, cerca de un pantano o entre el bosque.
Causa gran pavor a la tétrica procesión, portando sus acompañantes coronas, cirios y rezando en voz alta: se oye una voz cavernosa que dice: "meta el hombro compañero... ".
Por la zona, se habla de que hace muchos años la vieron pasar por el camino viejo y cuentan que era tanto el frio que se tenían que recostar a las barrancas para proteger el corazón.
MITO DEL DUENDE
Son ciertos espíritus traviesos que se encargan de atormentar a las personas de cualquier edad. En algunos casos las picardías no pasan de cambiar las cosas de su lugar o esconderlas; de revolcar lo que se halla bien colocado y traer noticias. En otros casos son perversos: cuando se la dedican a una persona o a una familia entera, van todas las noches a tirar piedras o terrones en una forma exagerada. Posee unos ojos muy malignos y dientes muy agudos. Suele aparecer en los cañadones o quebradas. Tiene predilección para con los niños de corta edad, aunque también golpea sin piedad a los mayores.
En la zona, se habla de que en algún momento embolató a 3 niños y que cuando las mujeres llevaban el almuerzo a sus esposos, llamaban pero quien contestaba era el duende, tratando así de poner en discordia a las familias.
MITO DEL MHOAN
El Mohán (también llamado Poira) es un personaje de una leyenda colombiana.
Es el mito más generalizado en Colombia y está enraizado en costumbres indígenas .Es travieso, medio sátiro, andariego, aventurero, músico, libertino, juguetón y con las muchachas es enamoradizo, bastante sociable, muy obsequioso y serenatero. Pero también puede ser traicionero y receloso, perseguidor de muchachas, hipnotizador, embaucador y feroz.
En la zona, se habla de algo diferente y es que en épocas remotas cualquier hombre podía convertirse en mohán, haciendo unos estudios los cuales le permitían transformarse en cualquier animal, y de este modo perturbar la tranquilidad en los hogares creando desconfianza y temor con sus maldades.
LA LLORONA
La llorona convertida en el espíritu vagabundo de una mujer que lleva un niño en el cuadril, hace alusión a su nombre porque vaga llorando por los caminos, orillas de ríos y quebradas.
En la zona se habla de que algunas veces fue escuchada a orillas de la quebrada la tolda.
LA MADRE MONTE
Toda vestida de hojas y de líquenes, vive en la profundidad de los bosques. La cabellera, le oculta el rostro. Ese es su enigma: podemos escuchar el grito de fiera entre los árboles y ver la silueta que se pierde en la espesura.
En la zona, se habla de que los cazadores la veían cuando salían con sus perros a los sitios aledaños a la quebrada la tolda y sus intrépidos peñascos.